La viajera
Siempre con prisa, con un paso delante del otro, todo el tiempo había un lugar al que ir, cosas por hacer, gente que ver, comida que comer y un sin fin de actividades por cumplir. Mujer fuerte, de carácter y de buen corazón, la viajera de lugar en lugar iba, siempre deprisa pero con tiempo para descansar, contemplar y admirar el paisaje, platicar con las hormiguitas, con las hermanas y hacer nuevas amistades.
La viajera no solamente empacaba para emprender un nuevo viaje, cuando en casa estaba mil visitas tenía y un taco siempre ofrecía, un par de horas de siestas ya era "mucha dormidera", y claro, la vida es tan corta que en un instante se puede disipar, tan consciente, la viajera todo quería experimentar y disfrutar.
Siempre con aires de grandeza y autoridad a algunos hacía temer, e incluso, con algunas buenas regañaderas nos hacía cambiar de parecer, y aunque no fuera algo agradable siempre lo hacía porque quería nuestro bien, de igual forma, con un gran amor a todos alimentaba y la plática siempre echaba, los Pérez siempre pendiente de ella estaban, los sobrinos y los nietos a cada rato la visitaban, y ni se diga de los hijos, siempre atentos a los que se ofreciera.
La viajera todos lados quería visitar, amante de la comida no solamente gozaba de probar cada una de ellas, sino que incluso, ponía el corazón y alma al cocinar, ya fuera un buen pozole, tamales o carnitas, a la viajera con un solo taco te hacía viajar por toda la República.
Además de viajera y cocinera, también era una buena emprendedora, madre, tía y abuela. Poco o mucho tiempo pasaba en casa, dependiendo de sus actividades, pero siempre intentaba dar lo mejor, todo el tiempo luchó contra adversidades y siempre las superó, la vida de la viajera siempre pudo ser difícil pero una tremenda fortaleza la acompañaba con cada paso que daba, después de tanto ajetreo y de tanto tiempo estando ocupada era el momento perfecto para ir a la playa y hoy, después de tanta adversidad, ha empacado una vez más las maletas, mismas que van llenas de:
- Los mejores recuerdos con su familia
- Los juegos con sus nietos
- Dulces voces
- Sus recetas favoritas
- Orgullo por su familia
Las maletas están listas y el camión hacia un nuevo destino ha llegado, la viajera no va sola, siempre va acompañada del Compañero, de Julio y del resto de su familia, todos visitarán la playa y disfrutarán del cálido sol por un par de días, después volverán a empacar y regresarán a la casa, tal vez no como lo solían hacer, pero regresarán y siempre nos acompañarán.
La viajera visitará todos los rincones del mundo y cuando cansada esté, regresará a su hogar, verá a sus hijos y nietos, se dará cuenta que hay más fotos de ella y de su fiel Compañero, un rico pozole hará y lo devorará con gracia, subirá y bajará los escalones y diario a todos visitará, cuando no nos queramos levantar de la cama entre sueños nos dirá, "ya levántate, ya fue mucha dormidera" y con su fortaleza, nos acompañará a cada paso que demos para visitar los mismos lugares que ella algún día visitó.